Hoy doy inicio a
esta serie de casos, para ayudar en la negociación con la editorial.
Hoy mi amiga será
llamada “S” y la editorial: “E”.
El caso.- La
semana pasada mi amiga española S que es pediatra (34), me preguntó en Google+
si por mi experiencia como profesor en ventas y negociación, podía ayudarla a
decidir en una propuesta de E. Le respondí que estaría encantado de ayudarla.
La propuesta.- Lo
que propone E, es que la novela de S pueda darse a conocer pues es muy
interesante; pero para hacerlo ambos deben de compartir gastos y utilidades.
Ciertamente esta
es una forma elegible por el escritor(a) para que su novela llegue a imprenta,
a librerías y desde luego, al lector(a).
Pero… ¿Qué sabe E
de S?
Sabe que S busca
ver realizada su novela, la cual es de suspenso. Sabe que 3 editoriales no la
han aceptado. ¿Cómo supo todo esto? Pues S fue muy confiada o muy ingenua en
revelar información en un cuestionario que E le dio, como primer paso para “entenderse”.
S también reveló que estaría dispuesta a invertir 1,000 euros.
Recuerden bien
esto: la información en negociación, es poder.
En negociación, quien posee más información de la otra parte, tiene mejor poder para negociar; digamos: unos 200 ejemplares gratuitos para mí. Un viaje a París para dos personas por X días y con X,000 dólares de bolsa de viaje incluidos si mi novela llega a ser Best Seller o, simplemente: ¿qué me regalas si firmo contrato contigo?
Por supuesto que
nada de esas “cositas” adicionales, podrán ser ni siquiera propuestas por S,
dado que E, al poseer la información de S, es quien ahora tiene el poder de
proponer… “sus” condiciones.
Y… ¿Qué sabe S de
E?
Sabe que E le
habla de un 50/50 para todo, pero también le dice que ese porcentaje “podría variar”.
S, no sabe: ¿cuántos escritores ya firmaron contrato con E? ¿Cuántos de ellos están
satisfechos con el trato? Tampoco sabe si E ha pagado puntualmente las regalías
e ignora si la distribución de los libros fue realizada con eficiencia en las librerías
españolas.
Quiero volverlo a
repetir, para que se grabe perfectamente en sus frágiles neuronas: la
información en negociación, es poder.
Si quieren
negociar en una mejor posición y obtener mejores condiciones a su favor, entonces
quien tiene que revelar información es la editorial y no ustedes. Este es un “juego
de poder” que tienen que ganar pues de lo contrario, “se los comerán vivos”,
incluidos… sus zapatos, botas, relojes y etc.
Además piensen en
esto, escribir su libro les ha costado, sudor, lágrimas, preocupaciones y eso también
debe ser considerado en el paquete, ¿no creen?
Ahora, como
ustedes son “bien listos” me dirán: existen editoriales “poderosas” con las
cuales es imposible negociar. Yo les diría que sí es posible y que he negociado
con una de ellas, pero sus condiciones y las mías no resultaron favorables para
ninguno, pero el tema puede resurgir en algún momento por cualquiera de
nosotros, pues hemos sabido negociar y hemos quedado en buenas relaciones. Esto
en negociación se denomina: el poder del precedente; pero eso será otro tema a
tratar.
Lo cierto es que
un buen grupo de editoriales han perdido poder gracias a Internet, a la
Generación Kindle (a la cual pertenezco), a las redes sociales y a otros muchos
factores que trataremos más adelante. Por tanto no se dejen sorprender: ustedes
tienen el poder.
Esta primera
etapa llega hasta aquí. S se reunirá con E en la presente semana en Barcelona,
y ya me dirá la propuesta real que le otorga E y, veré con ella de poner… todo
en la balanza.
¿Qué sucederá?
¿Podrá S volver a
tomar el control sobre E y lograr mejores condiciones para ella?
Lo sabremos en la
siguiente edición.
Los invito a
seguirme en:
Nos leemos mis
románticas amigas, mis amigos.
Hasta la próxima :)
PD.- Si desean dejar comentarios, pueden hacerlo desde anónimo, de no poseer blog ni otro. Gracias
1 comentarios:
Genial la exposición del caso, es verdad que las editoriales se aprovechan bastante de los autores noveles al no tener experiencia. Post como estos nos ayudan mucho a saber movernos por este mundo loco.
Un saludo
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